Puede que en algún momento se nos pasase por la cabeza “regalar” un seguro de vida y hacerlo por sorpresa, es decir, contratar el seguro de vida como tomador e inscribir como asegurado a otra persona sin que ésta lo sepa. Bien, pues eso no puede hacerse en España, según la normativa vigente: el asegurado en un seguro de vida debe conocer y dar su consentimiento expreso a ser asegurado.
Según la Ley de Contrato de Seguro, si el tomador de la póliza (que es quien contrata y paga el seguro) no coincide con la persona asegurada, haría falta el consentimiento expreso del asegurado por escrito, salvo que por otro medio pueda acreditarse su interés por la existencia de ese seguro.
Por tanto, no se puede contratar un seguro de vida sin que la persona asegurada lo sepa. Si el asegurado fuera menor de edad haría falta, además, la autorización de sus representantes legales.
Por otro lado, hacer un reconocimiento médico o responder a un cuestionario que nos presente la aseguradora con independencia del valor del riesgo a asegurar, es una cuestión comercial que está recogida en la normativa de suscripción de las aseguradoras. Tampoco hay una cantidad mínima de capital asegurado legalmente establecida por el que una aseguradora no deba o pueda someternos a un cuestionario, es una cuestión que queda a su criterio y sin este trámite un seguro de vida no se puede celebrar.
¿se puede hacer un seguro de vida con desconocimiento del asegurado?
NO, Ya que el asegurado en un seguro de vida debe conocer y dar su consentimiento expreso a ser asegurado.
Tal y como hemos indicado, así lo establece la Ley de Contrato de Seguro, en la que se determina que si el tomador de la póliza no coincide con la persona asegurada, hace falta el consentimiento expreso del asegurado por escrito para dar validez a ese seguro de vida.
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